Mi mirada se perdió en la profundidad de tu mirada a la que tanto amaba y a la vez odiaba. Algún día lograremos hablar y arreglar algunas de nuestras tantas diferencias
porque ya me cansó de tanta indiferencia. Piénsalo bien y cuando estés dispuesto a hablar dímelo. Pero solo déjame decirte una cosa te quiero y quiero muchos besos de tu boca. Pero bueno, me voy a despertar y voy a dejar de soñar. Acuérdate que siempre lo llevare guardado en mi corazón y soñaré cada día con que todo vuelva a ser ese cuento feliz que empezamos y que creíamos que nunca tendría final.
No hay comentarios:
Publicar un comentario